Wenhong Chen & Barry Whelman
Navegando por las siguientes secciones, exploraremos universos no tan desconocidos, como la brecha digital y las inteligencias artificiales y, a partir de ahí, se buscará analizar sus usos cotidianos en el día a día y contrastarlos con la Teoría del Recurso y la Apropiación de Jan A.G.M. Van Dijk.
Introducción
Las inteligencias artificiales en la vida cotidiana
¿Qué son las AI ?
¿Qué es GPT?
Metáfora a la brecha digital
Problema de la brecha digital
Niveles de apropiación
Uso de AI
Mapa conceptual de la teoría de Jan A.G.M. Van Dijk, 2005.
Metodología y propuesta de uso.
Resultados.
Sugerencias y conclusiones.
En esta sociedad moderna y globalizada hemos vislumbrado la velocidad con la que avanzan las tecnologías y se establecen en un número mayor de sectores de producción y entretenimiento para ayudarnos a tareas de todo tipo. Esto nos podría resultar en ocasiones bastante cercano a lo Sci-Fi que leemos en historietas, novelas o que observamos en el cine o televisión, sin embargo, es algo con lo que convivimos a diario y en todos los espacios, pero, y al contrario de estas representaciones literarias y audiovisuales, el problema con las nuevas tecnologías no suele ser relacionado al miedo que nos plasman estos recursos recreativos, sino a problemas múltiples relacionados con el acceso y uso de estas tecnologías. El contexto mexicano presenta particularidades para el desarrollo y apropiación de las nuevas tecnologías, lo que no nos ha conducido a la inminente aniquilación de la raza humana, sino a la emergencia de una nueva brecha digital y eso es de lo que hablaremos en esta investigación.
Durante la pandemia por COVID-19 nos enfrentamos como sociedad a la modificación de nuestras rutinas y procesos sociales tales como la educación, el trabajo, actividades recreativas, etc., las cuáles tuvieron que apoyarse de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) que, según Julio Cabero Almenara, están compuestas de tres medios básicos: la informática, la microelectrónica y las telecomunicaciones de manera interactiva e interconectada, lo que, en términos de comunicación, permite crear nuevas realidades, término muy parecido al que usamos en el pique de la pandemia para referirse a las nuevas formas de convivencia que esta nos trajo.
Esta circunstancia inesperada, junto con el avance desesperado de las nuevas tecnologías, nos llevó a un nivel de desesperación similar. La inmediatez que nos ofrecen para informarnos y/o ayudarnos, ha generado que cada vez surjan más mediadores tecnológicos para acompañarnos con tareas de la vida cotidiana, como ha ocurrido con la inteligencia artificial (AI, por sus siglas en inglés) y a su vez, con desesperación semejante, a generar nuevas brechas importantes, no únicamente de acceso, sino también de uso de las nuevas tecnologías.
Como miembros (partícipes o no) de la era de la información, podemos darnos cuenta de que nuestras relaciones y formas de vida han sido interceptadas por el internet y las TIC (tecnologías de la información y la comunicación) y del mismo modo, como en el resto de aspectos de la vida social, esta no está exenta de no ser accesible para todas las personas. Esta inaccesibilidad se representa en forma de brechas; de género, salarial, de acceso a la educación, a la salud, a la vivienda y la que nos acontece en esta investigación: la brecha digital.
Hemos hablado de inteligencias artificiales desde hace décadas en la ciencia ficción, en el mundo del cine y el entretenimiento. Crecimos viendo robots inteligentes y programas sofisticados de administración que resultan en superhéroes que salvan al mundo, por lo que nos resulta casi de ensueño que al día de hoy, 2023, estemos conviviendo con ellas de manera cotidiana y nos ayuden a tareas tan simples como las tareas escolares. Pero, ¿qué son?
Según Fabio Morandín-Ahuerma en su artículo titulado "What is Artificial Intelligence?" Una inteligencia artificial es "la capacidad de una máquina o sistema informático para simular y realizar tareas que normalmente requerirían inteligencia humana". Adicionalmente, de manera exploratoria le preguntamos a ChatGPT qué es una AI y esto fue lo que nos mencionó:
"La inteligencia artificial (IA) se refiere a la simulación de procesos de inteligencia humana por parte de máquinas, especialmente sistemas informáticos. Estos procesos incluyen el aprendizaje (la adquisición de información y reglas para usar la información), el razonamiento (usar las reglas para llegar a conclusiones aproximadas o definitivas) y la autocorrección".
Igualmente le preguntamos qué es "él" y esto fue lo que contestó:
"Soy un modelo de lenguaje desarrollado por OpenAI llamado GPT-3.5, basado en la arquitectura GPT-3. Mi función principal es procesar y generar texto en lenguaje natural en respuesta a las preguntas y solicitudes que los usuarios me hacen. Puedo proporcionar información, explicaciones, sugerencias, realizar tareas de procesamiento de lenguaje natural como resúmenes, traducciones y generación de texto creativo, entre otras cosas".
De esta forma podemos notar las relaciones que presentan sus definiciones de "sí" mismo con las de AI y entender por qué cuando mencionamos el uso de AI en la vida cotidiana, la gente suele "irse" a ChatGPT.
Uno de los principales problemas del entendimiento de la brecha digital es que se entiende como un maniqueísmo; o tienes acceso o no lo tienes, o sabes usarlas o no sabes. Y no es así.
La metáfora de la carrera es un método que utilizaba para explicar la brecha de género a mujeres y hombres que se adentran por primera vez a términos o movimientos feministas: imagina que tú y otra persona van a salir de viaje, pero van a tomar 2 carreteras diferentes:
La vía de la otra persona es una autopista, nueva, hay paradas cada cierto tiempo, puntos de auxilio, seguro de viaje e infinidad de más servicios que ayudarán a que complete el viaje de la forma más fluida posible.
Tú, por el contrario, viajas en una carretera un poco antigua, más larga y sin muchas de las ventajas que el otro viajero tiene, por lo que te va a resultar muy difícil, por no decir imposible, poder llegar primero y ya ni hablar de llegar antes, por lo que completar el camino va a costar mucho más esfuerzo para ti que para el otro conductor.
Esta metáfora busca ejemplificar el por qué se deben generar medidas adecuadas para que, bajo las mismas condiciones de camino y una misma carretera, se pueda alcanzar el objetivo. Esto mismo pasa con la brecha digital. No tenemos las mismas posibilidades ni las mismas circunstancias y esto nos hace tener disparidades a la hora de acceder y aprovechar los recursos de la era digital.
Entender la brecha digital como un viaje en carretera y no como un socavón gigante entre 2 grupos, puede ayudar que esta se entienda y atienda de una forma más clara.
Chat GPT (Generative pre-trained transformer), es un chatbot de AI que, dada su capacidad de generar textos a partir de predicciones y promts (indicaciones), ha creado un parteaguas, principalmente, en la forma de hacer la tarea de muchos estudiantes. En un artículo publicado por el periódico mexicano El Heraldo (https://heraldodemexico.com.mx/tecnologia/2023/6/29/chat-gpt-en-el-entorno-academico-uso-beneficios-contras-517375.html). Presenta una encuesta realizada a estudiantes universitarios en México, la cual reveló que el 100% de los encuestados conoce el término de Inteligencia Artificial y el 92% admite haber utilizado Chat GPT para la realización de labores escolares. En términos de uso, la opción de "para responder preguntas" fue la más seleccionada con 75% seguida de "generación de textos" (62.5%) y "creación de resúmenes" (50%).
Esto nos habla de una realidad, los estudiantes utilizan estas plataformas para ayudarse con sus trabajos escolares y a su vez, nos presenta una necesidad innegable de la urgencia del adiestramiento de estas para reforzar el aprendizaje. Sin embargo, podríamos preguntarnos, ¿se podía inferir que la generación autónoma de pensamiento crítico y capacidad de razonamiento y producción de productos de los estudiantes podría verse afectada por la existencia de una nueva brecha digital enfocada en usos y habilidades de las TIC?
Jan A.G.M. Van Dijk, profesor de ciencias de la comunicación en la Universidad de Twente, en Paises Bajos, nos habla al respecto a partir de la brecha digital, la cual nos menciona que es el espacio simbólico que existe entre las personas que acceden a formas de tecnología de la información y la comunicación y las que no y lo aborda a partir de una propuesta teórica titulada Accesibilidad en Etapas a la Tecnología, cuyas etapas son cuatro: motivación, acceso, habilidades digitales y uso. Nos ejemplifica estas etapas a partir del modelo que se adjunta, de elaboración propia, en la sección “TRA (Teoría del Recurso y la Apropiación)”
Brecha digital explicada en niveles:
En el primer nivel de la brecha se encuentran la motivación y el acceso físico. La motivación parte de las necesidades o gustos que llevan a los usuarios a utilizar las TIC, pueden ser a partir de necesidades laborales, profesionales, educativos, por simple gusto o de forma recreativa.
En el segundo nivel se encuentran el usos y habilidades. Estas parten de las circunstancias posteriores al acceso, desde habilidades básicas de manejo de interfaces hasta aprovechamiento profesional y generación de nuevas tecnologías. También incluirá el conocimiento de usos no meramente prácticos sino simbólicos, es decir, no es lo mismo utilizar Google Translate para traducir palabras o frases de canciones, que enterarse de que esta plataforma es una AI que puede traducir, con un lenguaje cada vez más natural, textos, imágenes, pdf y audio, funciones que pueden llegar a ayudar a quebrar con la limitación del idioma para el uso académico. Como ejemplo podemos presentar que la mayoría de los textos consultados para esta investigación fueron traducidos mediante AI para facilitar su comprensión y esta nos ayudó a comprender terminologías propias de la comunicación que comúnmente no se enseñan en las clases básicas de inglés.
Hablando de los usos y habilidades, tenemos ahora el tercer nivel. Este aprovechamiento de las TIC lleva a que ciertas personas puedan acceder a sitios inseguros de la red y que a partir de ahí puedan atentar contra la seguridad de demás usuarios, algunos ejemplos son el ciberacoso que, cabe destacar, afecta más a las mujeres, puesto que se reafirman las posturas teóricas y epistemológicas antes mencionadas: la brecha digital afecta simultáneamente a los demás tipos de brecha y viceversa. También los hackeos, que se refieren al uso y total comprensión de las tecnologías por parte de usuarios y grupos de ciberdelincuencia.
Aquí se pueden nombrar muchos más tipos de delitos digitales que aún no tienen suficiente regulación y/o castigo puesto que no terminamos de entender lo enorme que es la red y lo poderoso que es entenderla.
Si bien el acceso se considera una fuente principal de desigualdad, se ha ido cerrando la brecha en ese aspecto, sin embargo, a su vez, aumenta la de uso. Ahora más personas quieren y acceden a las TIC pero siguen siendo ambiguas y deficientes las estrategias de alfabetización digital, así como normativas de usos incorrectos. Esto se reflejó de manera muy clara durante la pandemia. El profesor van Dijk lo aborda desde la perspectiva de un país primermundista con acceso casi completo a internet, con el 98% de sus habitantes, donde, aún así, fueron claras las implicaciones que se dieron a partir de esta falta de alfabetización digital.
Sin cruzar el océano, podemos encontrar cómo nos afectó esta falta de habilidades durante la pandemia al tener que adaptarnos de la nada a plataformas digitales para tomar clases. Lo vivimos con los maestros que no le entendían a zoom, lo viví al no saber que el buzón de salida no era de correos enviados sino los que no se pudieron enviar. Lo vimos en cada aspecto nuevo que descubrimos en la virtualidad. A partir de estos descubrimientos, nuestro autor reitera las metodologías probables de acciones afirmativas para reducir el impacto de la brecha especificada en los usos y habilidades.
Primero nos explica que existen tipos de desigualdades que refieren al concepto de brecha digital:
· Tecnológica
Refiriéndose a la falta de oportunidades tecnológicas enfocadas al acceso físico.
· Inmaterial
Alude a las oportunidades de vida, relacionada a la motivación.
· Material
Capital y recursos (económico, social, cultural, etc.) dentro del acceso físico y el uso colectivo
· Social
Relacionado a la capacidad de participación y posición, enfocada al uso individual.
· Educativa
Habilidades digitales aprendidas y capacidad de desarrollarlas.
Metodología
El autor nos presenta estrategias de reducción de la brecha de manera listada y concisa;
• Mantener o revitalizar la movilidad social
• Aumentar el número de programas sociales a largo plazo adaptados a grupos desfavorecidos en sus propias comunidades
• Proporcionar tecnología digital más barata
• Diseñar tecnología digital que sea más fácil de usar
• Elaborar normas y reglamentos para gestionar el uso beneficioso de los medios digitales
Nos enfocamos, dado el caso que busca abordar esta investigación, en la última estrategia; elaboración de normas y reglamentos para gestionar el uso beneficioso de los medios digitales. Empezamos por la identificación del uso de las tecnologías, en este caso AI, aplicando cuestionarios sencillos y rápidos con las categorías de análisis que se presentan en la teoría como subconceptos e identificamos el porcentaje de usuarios y conocimiento, así como características e interferencias en los tipos de acceso. Estos fueron tomados al azar, no son representativos de la población estudiantil total, representan una muestra pequeña no estadística, sin embargo, como definimos en la hipótesis, la tendencia es muy clara y se puede intuir que no presentará cambios significativos para el análisis de los resultados.
Lo anterior se presentará en la siguiente sección de manera más práctica.
El acceso a internet representa la principal incidencia de uso, continuando con la obtención de aplicaciones para usarlas, mientras que el tiempo y la creatividad son las menos destacables
En las habilidades se destaca notablemente el fin individual y capacidad básica de uso, mientras que las de conocimientos técnicos son las que tienen la menor cantidad de selecciones.
Menos del 10% de las personas que contestaron mostraron rechazo de uso de AI
Dado que la motivación se presentó muy clara por parte de las personas que contestaron el cuestionario, fue más la no necesidad de uso la que destacó en esta sección.
El 90% de las personas que respondieron el cuestionario se notaron motivados y afirmaron usar AI, por lo que, el primer nivel, motivación y acceso físico, parece cubierto.
El tener acceso a internet es la principal incidencia del uso de AI, incluso por encima de las aplicaciones, puesto que no el 100% de los que seleccionaron el acceso a internet seleccionaron necesariamente contar con las aplicaciones específicas para usarlas. Los menores seleccionados fueron tiempo y creatividad, por lo que puede representar que se usan para tareas rápidas o minimizar tiempo de realización de las mismas y no tanto de innovaciones o creaciones propias.
Lo anterior se refuerza con los resultados en habilidades, cuyos resultados apuntan al fin individual, lo que nos puede dar muestra de que si bien, las personas que respondieron fueron activas en el uso de AI, es un uso bastante básico o promedio, por lo que no se están generando habilidades más específicas o detalladas de estas nuevas tecnologías que, por más que nos parezca loco, hipernovedoso o fantasioso, existen y la cercanía de las personas hacia estas aumenta exponencialmente día con día.
Lo que nos compete ahora es, ¿cómo podemos ayudar a que el ciclo de la apropiación de las tecnologías se cumpla de manera efectiva?
Si bien esta fue una exploración bastante superficial del uso de las AI, nos buscaba ayudar a confirmar hipótesis para llevarnos a crear, no de manera infundada, recomendaciones y estrategias de difusión útiles para la explotación de recursos con AI para que el cuerpo estudiantil y docente lleguen a tener una apropiación completa de las TIC.
si bien no representa un problema en los resultados que obtuvimos, es importante garantizar espacios de recreación digital con herramientas físicas para ello;
La motivación es clara, sin embargo, aún podemos percibir qué hay quienes no la muestran en lo absoluto porque no creen necesitar estas nuevas tecnologías;
El uso individual predomina bastante pero se puede llevar a la aplicación en colectivo a partir de;
Las habilidades predominantes son digitales y para uso individual, pero no resultan suficientes para lograr una habilidad completa, puesto que las nuevas tecnologías suelen tener estrategias de uso no muy conocidas que facilitan y maximizan su aprovechamiento
Las y los estudiantes del CUCSH tienen conocimiento y uso de TIC y AI pero su desarrollo de habilidades resulta bastante joven aún, por lo que recomendamos incansablemente que la difusión y uso educativo de estas puede resultar beneficioso para estudiantes y profesores, desde ahí consideramos que la implementación de estas herramientas incentivará su uso y ayudará notablemente a que este no sea efímero ni por momentos, sino más allá.
Las AI tienen mucho que ofrecernos y es muy poco lo que las dejamos enseñarnos, y, contrario a los que postulábamos en el primer apartado “¿aquí comienza la aniquilación de la raza humana?” no hay rastros, por el momento, de que estas puedan llevarnos a posibilidades catastróficas, sino que es tal vez nuestro desconocimiento lo que hace que no percibamos el impacto positivo que nos pueden traer.
Sin embargo, el rezago que mostramos en aspectos de usos y habilidades sí puede llevarnos a posibilidades catastróficas, como quedarnos cada vez más lejos en la carretera y aumentar los obstáculos que se han presentado históricamente y siguen presentándose a la hora de apropiarnos de las nuevas tecnologías.
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